smile

smile

Un día la vida me golpeó tan fuerte que me enseñó a resistir. Un día me mintieron de tal forma que me dolió y entonces aprendí a ir siempre de frente con la verdad. Un día me falló quien menos imaginaba y entendí que las palabras hay que cumplirlas y de los actos hay que hacerse cargo.
A veces es necesario dar vuelta a la página y empezar de cero, aunque cueste o duela.
El mejor guerrero no es aquel que triunfa siempre sino el que vuelve sin miedo a la batalla.

viernes, 16 de mayo de 2014



Día 8

Fue un beso muy dulce y lento al principio y luego fue un beso más apasionado, como de desesperación, como si él lo hubiese deseado de hace mucho tiempo.
Separó sus labios de los míos y yo abrí los ojos, me sentí rara y a la vez muy feliz. Me fijé en su cara, que me miraba con curiosidad porque yo no decía nada, es que en verdad no podía, me había cogido desprevenida, no me salía ninguna palabra de la boca. Jorge seguía con las dos manos en mi cintura y yo las tenía alrededor de su cuello. Me sentí tremendamente estúpida porque estaba de puntillas ya que él me sacaba una cabeza, aunque se dio cuenta y se agachó un poco y eso me hizo sentir aun más estúpida.
-¿Estás bien?- dijo.
-Si estoy bien-respiré hondo y él se rió.
-No soy muy bueno expresando esto con palabras, siento…
-No podrías haberlo expresado mejor- le interrumpí mientras dejaba caer mis brazos desde su cuello deshaciendo el abrazo, pero él no me soltó.
-Me tengo que ir- quitó sus manos de mi cintura, desganado, ya que no quería irse- ya es tarde- le entiendo, yo tampoco quería moverme de allí.
-Sí- no quería que él se fuera.
-No te angusties- me acarició la mejilla- te veré mañana.
-Adiós-le sonreí y me besó en la frente.
-Te quiero- dijo.
Se dio la vuelta y se fue.
Sonreí como una tonta al escuchar el te quiero, estaba tan contenta. 

Entré a mi casa con una sonrisa de oreja a oreja, estaba tan feliz aunque tenía que disimular un poco delante de mis padres, no tenía porque levantarles sospechas.
-Hola- dije- ya he llegado.
-Hola Leah-me saludó mi madre, mi padre estaba viendo la televisión- ¿lo has pasado bien?
-Sí, lo he pasado genial.
-Me alegro mucho- continuó- te he dejado un poco de lasaña en la encimera, caliéntala y come algo.
-Gracias mamá.
Ella y mi padre se fueron a dormir y yo subí a mi habitación a dejas mis cosas y me di cuenta de que me camiseta olía como Jorge, a ese perfume que se echa todos los días. ‘’Creo que no la lavaré jamás’’ pensé.
Me duché y me puse el pijama para bajar a cenar, intenté no hacer mucho ruido para no molestar a nadie, cerré la puerta de la cocina para calentarme la lasaña en el microondas. Mientras se calentaba, saqué un zumo cualquiera de la nevera y cogí los cubiertos del primer cajón de la encimera y los puse en la mesa, me senté porque le faltaba un poco a mi comida, tenía hambre, a ver si se calentaba ya.
Pensé en lo que acababa de pasar y todavía no era consciente del beso, como si no hubiese sido real y solo me lo hubiera imaginado. Es que fue tan perfecto, debajo de la luz de la luna como en las películas y él era también más perfecto aún…

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡TINNNNNNNNNNNNNNNNNN!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Pegué un brinco en la silla, tremendo susto me pegó el microondas de las narices. Sin más rodeos, saqué mi plato y comí en silencio mientras miraba el reloj, las 23:07… ¿qué estará haciendo Jorge ahora mismo?
Ahora que me doy cuenta, me parezco a las chicas enamoradas de las películas que están pensando en su chico todo el rato. Cuando les veía me parecía absurdo y resulta que me he convertido en una de ellas. Parezco tonta pero me gusta sentirme así no sé por qué, es una sensación rara pero me hace sentir feliz y eso es lo que importa ¿no?

Terminé de comer y fregué los platos antes de subir a mi habitación. Luego preparé mi cama para  acomodarme en ella mientras me entraba el sueño, me pareció un buen momento para escuchar algo de música, así que cogí mi móvil y me di cuenta de que tenía un mensaje.
¿Será Jorge? Espero que sí. Miré el móvil con esperanzas de que fuese él y sonriendo de manera idiota, pero no era Jorge, era Kaytlin.
‘’Pues tía que bien disimulas que no te gusta Jorge. El caso es que volvía a tu casa para devolverte la chaqueta que te dejaste en mi coche y te vi algo ocupada. Menudo beso que le diste querida, ¿necesitas una bombona de oxígeno o ya estas recuperada? Ya sabes que te mataré por mentirme. ’’
Tendría que haber supuesto que alguien nos podría ver, pero bueno…
Le contesté a Kaytlin que ya hablaríamos en persona

Antes de quedarme dormida me sonó el teléfono, ¿por qué narices no lo habré puesto en silencio? No quería hablar con Kaytlin de aquel tema por el móvil. Odio hablar por teléfono, mientras más corta sea la conversación mejor y además me estaba muriendo de sueño ya. Miré a ver que me había dicho Kaytlin pero me llevé una sorpresa… no era ella.
Nuevo mensaje de Jorge- leí
‘’Gracias por esta noche inolvidable aunque durara poco, descansa.
Te quiero Leah. ‘’
Es muy cursi, pero me sonrojé igual y me dormí con una sonrisa de oreja a oreja.

4 comentarios:

  1. Oooooooowwwwwww amo este capítulo, amo a Jorge, amo a Leah, amo la lasaña.......AMO TOOODOOO! En serio que bonito lo del beso, es tan romántico, afortunada la que encuentre uno como ese jajajajajaja
    Me encanta naniiiiiiii, sigue así

    ResponderEliminar
  2. Jajjjaajajajajaja me alegro de que te gustara nani. Amo la Lasaña dice jajajajajajajajajjajajaj . Te quiero ♥♥

    ResponderEliminar
  3. Naniiii, quiero más capítulos. Estoy impaciente jijiji.
    Besitos

    ResponderEliminar
  4. Naniiii, quiero más capítulos. Estoy impaciente jijiji.
    Besitos

    ResponderEliminar